En el post de hoy te vamos a dar 20 tips con los cuales podrás ahorrar energía en casa, lo que significa una reducción significativa de tu factura.

  1. Para pasar menos calor en verano y ahorrar en aire acondicionado lo ideal sería colocar un revestimiento reflectante en las paredes.
  2. Utiliza siempre la lavadora con carga de agua fría.
  3. Apaga el calentador de agua si no lo vas a usar durante un tiempo, también es importante que si vas a poner un calentador nuevo lo hagas con la etiqueta de eficiencia energética.
  4. En invierno mantén las ventanas descubiertas para que pueda entrar el calor del sol, igualmente en verano mantén las persianas bajadas durante las horas de más calor para que no entre dentro de casa.
  5. Intenta tener el congelador siempre lleno de tu nevera.
  6. No utilices secadora, secar la ropa al aire libre es gratis.
  7. Usar, siempre que se pueda, electrodomésticos como el lavavajillas y la lavadora en modo económico.
  8. Usa el microondas para calentar alimentos, en lugar del horno, que gasta más.
  9. Reemplaza tus bombillas normales por aquellas de led de bajo consumo.
  10. Utiliza luces con temporizadores y sistemas para graduar la intensidad de la luz.
  11. Instala tubos fluorescentes siempre que puedas.
  12. No tapes las fuentes de calor con cortinas o muebles.
  13. No abras las ventanas con calefacción o aire acondicionado puesto.
  14. Importante tener en cuenta el etiquetado energético de los electrodomésticos.
  15. Evita mantener la puerta abierta mucho tiempo: puede ahorrar hasta un 5% de energía.
  16. Descongelar cuando la capa de hielo supere los 5 mm.
  17. Descongelando los alimentos en el interior de la nevera aprovechamos la energía que se ha utilizado para congelarlos.
  18. Desenchufa aquellos aparatos que a pesar de estar en reposo, siguen consumiendo energía, como la televisión cuando se queda el pilotito rojo.
  19. Compara las ofertas de las compañías energéticas y contrate la mejor tarifa
  20. Buena parte de lo que pagas en tu factura es la potencia contratada: cada 1,15 Kw de potencia suponen casi 50 euros al año. Por eso es fundamental controlar cuánta potencia contratas.